miércoles, 24 de diciembre de 2014

Construye tu Ángel Escarlata



 Construye Tu 
Ángel Escarlata 

Ninguna navidad esta completa si no haces arte, y con arte se refiere en crear algo que produzca algún sentimiento a los demás  sentimientos que pueden oscilar entre nauseas, desaprobación  admiración, excitación,  tranquilidad y devoción. Por tanto para esta época es bueno crear tu propio ángel,  un ángel de locura y glamour. Un correcto ángel,  no como el que estaba en el pesebre.

Los ángeles se suelen representar como seres de extrema belleza, con una apariencia androgina, rostros perfectos. Pero en nuevos tiempos, es mejor crear tu propia representación de ese ser perfecto, de ese ser protector, alejado de esa apariencia beata, y añadirle un sentido mas propio e intimo, mas oscuro de deseos y temores.

Por esta razón no es raro que Michelle e Inccub von Heels proponga su propio ángel, una creación que pasa por lo bizarro, sin dejar atrás el glamour y por supuesto darle protagonismo al rojo escarlata.

La idea en recrear un ángel, fue en tomar elementos que lo pueden hacer mas terrenal, dejar atrás las alas idealizadas de plumas; y pasarlas a estructuras sencillas metalizas, dando ese toque post-apocalíptico. Alas que tuvieran una fuerte presencia, que puedan representar temor, dolor, y magia.

La principal emoción trabajada en la creación de este ángel fue el dolor, ese sufrimiento innato que pertenece a la humanidad, ese dolor que se siente al perder alguien especial, perder un amor, ver destruido un sueño, ver como desamora la mitad de tu vida en menos de nada, pero aun así renacer y mantenerse con todas esas dolencias, mantenerse con todo el glamour.

Por esto este ángel contiene muchas formas de dolor, dolor de ver ciertas cosas, conocer ciertos aspectos. Dolor de ese amor que arranca tu entrañas, desmorona tu digestión y solo te queda la sensación de vomitar todo, y finalmente la perdida de sus brazos, pero aun estables en sus alas, como símbolo de tenerlo todo y perderle  pero con ese fantasma de que alguna vez estuvo.





No hay comentarios:

Publicar un comentario